El Ejército de Israel confirmó este martes haber tomado el control del lado gazatí del cruce de Rafah con tanques, tras una noche de bombardeos intensos contra el este de esta localidad sureña fronteriza con Egipto.
Fuerzas israelíes continúan «escaneando» el cruce, indicó esta mañana el Ejército sin especificar el número de tropas terrestres presentes, aunque recalcó que se trata de una operación «precisa y limitada» contra objetivos de Hamás.
Según un portavoz castrense, la toma del lado gazatí de Rafah fue realizada por la brigada 401 -compuesta en su mayoría por tanques- y la brigada de élite Givati, y llegó propiciada por el ataque desde esta área perpetrado por Hamas dos días atrás, en el que murieron cuatro soldados, y que según el Ejército confirmó esta zona estaba siendo usada por milicianos.
Contrario a un comunicado ayer lunes del Gobierno gazatí de Hamas, en el que advertía que la orden de evacuación del este de Rafah, comandada por el Ejército israelí, estaba teniendo una «respuesta limitada», el portavoz castrense dijo hoy que gran parte de la población pudo buscar refugio en Al Mawasi, Jan Yunis, y que esto facilitó la operación.
Pero al menos 18 gazatíes fallecieron la madrugada de este martes en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, tras una noche de bombardeos constantes también contra viviendas, después de que el Gabinete de Guerra israelí anunciase a última hora de ayer que no detendría su «operación» militar pese a seguir agotando la posibilidad de una tregua.
El Ejército, por su parte, dijo hoy haber matado a 20 supuestos milicianos en la zona este de Rafah con cazas y tropas terrestres, además de haber descubierto tres túneles operativos de Hamás y destruido un vehículo con explosivos.
Además, la misma fuente castrense confirmó que el cruce de Kerem Shalom sigue cerrado desde el ataque de Hamas por «razones de seguridad» y que desde este lunes no entra ayuda humanitaria en Gaza, algo que tampoco está previsto que cambie durante el día de hoy.
La entrada de ayuda humanitaria por el cruce de Rafah, vital para el abastecimiento de la Franja y usado por los gazatíes que buscan refugio en Egipto tras siete meses de guerra, se encuentra también paralizada.